Ni su fuerza sobre el escenario, ni su chorro de voz ni su original puesta en escena consiguieron que la madrileña Barei, con su ‘Say Yay!’, dejara en un buen lugar a España en el Festival de Eurovisión 2016. Tuvo que conformarse con el puesto 22 de 26 participantes: “Mi equipo está contento y sé que los fans en el estadio han disfrutado mucho la actuación. La gente se ha vuelto loca. Mi tema transmite superación, ganas de levantarte cuando caes. Y es lo que me toca ahora a mí”, ha asegurado.
Aunque asume con resignación su fracaso, defiende el buen trabajo hecho durante estos últimos meses y reconoce que le ha merecido la pena el esfuerzo: “He hecho lo que sé hacer, no podía intentar algo diferente. Estoy muy contenta porque en tres meses he conseguido más que en quince años de carrera gracias a Eurovisión. Me llevo mucho más de lo que he perdido”. Y añade: “Al final un número se queda registrado para siempre y duele, pero la esperanza da mucho más de sí en una carrera de largo recorrido. Prefiero ir despacio y lejos que caerme por ir rápido”.
La victoria la consiguió Ucrania y la española no consiguió quedar entre los primeros puestos, pero se metió a los europeos en el bolsillo. La acogida popular ha sido espectacular, como ella misma ha reconocido: “Han llegado a decirme que soy una enviada de Dios y eso me ha gustado mucho. Tengo que quedarme con ello”. Incluso las redes sociales ardieron con su actuación y fue la candidata más mencionada, seguida de los representantes de Francia, Irlanda e Italia.