Tras triunfar en España, Ana de Armas, actriz cubana popular por su papel en ‘El Internado’, se marchó a Los Ángeles donde, desde hace más de dos años, reside y cumple su sueño de trabajar con actores de la talla de Robert De Niro, Keanu Reeves o Harrison Ford. “Estoy feliz, asimilando lo que me está pasando. Hay veces que tengo que decirlo en voz alta para creérmelo. Siempre tuve sueños, pero reconozco que me está yendo mejor aún”, asegura en una entrevista para la revista Glamour España, cuya portada del mes de octubre protagoniza.
Sobre el hecho de ser considerada la nueva promesa latina, la cubana declara: “Estoy empezando, me queda mucho por hacer y por vivir. Me siento orgullosa de ser latina, de estar en Estados Unidos, así que la combinación promesa y latina me parece perfecta”.
La intérprete está trabajando al otro lado del charco con actores de la talla de Robert de Niro.
En cuanto a sus proyectos profesionales, Ana acaba de estrenar ‘War Dogs’, película biográfica dirigida por el cineasta Todd Phillips, uno de los creadores de la exitosa trilogía ‘Resacón en Las Vegas’, y está trabajando en la secuela de ‘Blade Runner’, de la que no suelta prenda: “Es un proyecto genial, en el que trabajaré con Harrison Ford y Ryan Gosling, que son maravillosos y que no puedo estar más feliz de que hayan querido contar conmigo para un proyecto de esa magnitud. Creo que va a sorprender a todos, sobre todo a los fans”.
Además, también desvela detalles sobre su relación con Keanu Reeves: “Le conocí en el rodaje de ‘Knock Knock’ en Chile y nos hicimos muy amigos. Luego produjo otra película y me volvió a llamar. Es una persona muy generosa, como ser humano y como actor, seguimos en contacto y él está feliz por todo lo que me está pasando. Es un regalo haberle conocido”.
Keanu Reeves se ha convertido en uno de sus mejores amigos en Los Ángeles.
Pero no todo es trabajo en la vida de esta actriz española por adopción, su familia juega un papel muy importante para ella: “Mis padres y mis amigos en Cuba lo son todo para mí (…) Cuando veo que la cosa se pone muy loca, con comentarios tipo la estrella tal o la promesa cual llamo a mis padres, charlo con ellos y me ayudan a seguir con los pies en la tierra. Y cada vez que puedo voy a visitarles, les ayudo en lo que puedo”.
