Las afirmaciones sobre los beneficios de realizar un desayuno completo y equilibrado cada día son incontables: una comida que ayuda a poner nuestro cuerpo en marcha y que le proporciona la energía necesaria para funcionar durante la mañana. Al margen de este beneficio básico, ¿qué ignoramos sobre el desayuno?
Kaiku Sin Lactosa comparte 8 cosas que probablemente no sabemos sobre el desayuno, al punto de desmontar uno de los grandes dichos: “El desayuno es la comida más importante del día”.
1. El desayuno tal y como lo conocemos actualmente es una invención reciente. La historiadora americana Abigail Carroll sitúa el origen del desayuno actual en la segunda mitad del siglo XIX. Antes, la primera comida del día se asemejaba más a la cena o a un almuerzo, incluyendo alimentos como la carne. La evolución hacia el desayuno que conocemos hoy en día se produjo paulatinamente, debido a las indigestiones producidas por los ingredientes más contundentes.
2. Ayuda a comer mejor durante el resto del día. Los estudios demuestran que aquellos que realizan un desayuno completo y saludable y se alejan del desayuno cargado de azúcares y carbohidratos de rápida absorción, se decantan a lo largo del día por alternativas más sanas. ¿La razón? El cuerpo llega desde la mañana surtido de nutrientes necesarios lo que evita el llamado stress-eating: comer con ansiedad, que muchas veces desemboca en alternativas poco saludables.
3. No es la comida más importante del día. Un mito que ha perdurado durante años con la buena intención de evitar no consumirlo. Sin embargo, 2019 es el año en el que el desayuno ya no es el “más importante”. Expertos nutricionistas han desvelado que todas las comidas, preparadas de forma saludable y consciente, son importantes, ya que cumplen funciones diferentes a lo largo del día: el desayuno permite activar el cuerpo durante la mañana; la comida hace las veces del desayuno pero a mitad de día; la cena es la puesta a punto para el descanso y la relajación; y los snacks a media mañana equilibran y sacian al organismo de forma saludable para no pasarse en las comidas principales.
4. ¿Cómo desayunamos los españoles? Según la Encuesta Nacional de Salud de España, el tipo de desayuno predominante entre la población española consiste en algo líquido más pan, galletas, cereales o bollerías. Este tipo de desayuno (consumido por un 57% de los encuestados) supera con mucho al siguiente desayuno más popular, consistente en únicamente algo líquido (12%): café, té, leche, yogur o cacao. Como tercera opción, el desayuno más completo: alimento líquido, fruta y alimentos sólidos como pan o cereales; consumido por solo un 9% de la población. ¿Nos damos un aprobado raspado?